Dentro de pocos dias, el Sani comenzará a trabajar en la nueva temporada de División de Honor: entrenos, planificación, fichajes, etc.
Sin embargo, la Junta Directiva con su Presidente al frente, lleva meses trabajando en multitud de asuntos ajenos al equipo senior: promoción en colegios, preparación de documentación para subvenciones, venta de loteria, asuntos federativos, etc. Una multitud de trabajos y gestiones que no vemos nunca los aficionados en los campos de beisbol, cuando disfrutamos de nuestro deporte favorito, con nuestro Club de toda la vida.
Ese trabajo diario que realizan tanto el Presidente, como toda su Junta Directiva, es un trabajo callado, muchas veces ingrato, y casi siempre incomprendido. Son muchas horas de trabajo por «amor al arte», muchas horas de «peleas» con ayuntamiento, diputación, colegios, federación, etc. «Peleas» con muchos papeles que hay que presentar antes de comenzar la nueva temporada, muchas llamadas de teléfono, muchas horas hurtadas a la vida familiar o profesional. En definitiva, mucho trabajo para poca gente.
El Sani es el único representante de Bizkaia y de la Com. Autónoma en esto del beisbol. El Club ha cumplido hace poco su 50º aniversario, cumpleaños que se celebró con muchos amigos/as que se acercaron de nuevo al Club, aunque solo fuera por una tarde de beisbol.
Las perspectivas de nuestro deporte no acaban de despegar. Cada vez son menos los clubes que existen. Han muerto muchos, y otros andan heridos. La reivindicación histórica del Sani de tener su propio campo en el barrio, sigue siendo trabajada por la Junta Directiva, sin desánimo, pero conscientes de la dificultad que lleva el convencer a las instituciones correspondientes para realizar tal inversión. Sin embargo, esta reivindicación debe seguir siendo trabajada y reclamada en aras a la propia supervivencia del Club en particular, y del beisbol en Euskadi en general.
La promoción es una tarea dificil. Todo el mundo es consciente de cómo y cuánto está cambiando nuestra sociedad. Cada vez es más dificil enganchar niños para nuestro deporte. No sólo el beisbol decrece en jóvenes practicantes, sino que otros deportes, hasta no hace poco «normales» y muy conocidos y practicados, se están encontrando con los mismos problemas para encontrar chavales que quieran practicar un deporte de equipo que no sea futbol.
No se trata, de que el Sani lo esté haciendo mal en el tema de la promoción, sino que el handicap es muy grande. Las Federaciones correspondientes se nutren de las mismas personas que trabajan en los clubes, con lo que la tarea para estos «voluntarios» se duplica.
Es por todas estas dificultades que se encuentran diariamente los responsables de nuestro Club, por lo que todos ellos son indispensables, si no insustituibles al momento presente. Su trabajo desde hace muchos años, ha conseguido hitos importantes: ascenso a División de Honor, competir en Europa por primera vez, meritorios 3º y 5º puestos la Dv. Honor en últimas campañas ante equipos con presupuestos muy importantes y fichajes de grandes ligas, pagina web propia, organización de campeonatos estatales, etc.
Es esta la Junta Directiva, encabezada por su Presidente, que tenemos. La que ha logrado estos hitos históricos para el Club. Pero los éxitos, no sólo los fracasos, son una conjunción de la tarea de estos directivos, de los técnicos y de los jugadores. No podemos tener un buen equipo senior, sin que exista esa o esas personas que tirando de su tiempo libre, o robando al trabajo o a la familia, se dedican a preparar el material, organizar los desplazamientos, hacer las fichas, vender loteria, trajabar en la txozna, y encima, llenar huecos en las gradas de El Fango. No podemos vender tacos de loteria, sin que ese directivos o directiva, haya puesto el sello del Sani en la miles de papeletas que se venderán. Y tendrá también que venderlas, claro.
No estaríamos donde estamos, sin que esos directivos trabajen dia a dia en estos y otros muchos temas. No existiría el beisbol sin ellos.
No podemos criticar cuando uno de estos directivos está sobrecargado de trabajo y no puede llegar a todos los lugares a donde le gustaría llegar. Nadie de ellos está aqui por dinero. Solo les anima su altruismo, su amor por el deporte, por los jóvenes, por los niños, y por luchar, de alguna manera, por algo bello y mejor que la dura vida diaria. Ninguno de ellos sobra. Es más, falta alguno o algunos.
Esta reflexión, pretende llamar la atención sobre estas personas, que dia a dia, hacen que el Sani exista, que tenga vida (poca o mucha). Y un llamamiento para que muchas personas, cercanas al Club, se animen a acercarse un poco más y preguntar : ¿puedo hacer algo por el Sani ?.
Me consta que son pocos nuestros directivos. Quizá no sobre nadie. Y seguramente, faltemos muchos.
UN AFICIONADO
SAN INAZIO Béisbol_______________ desde 1.956 
En poco o nada se puede mejorar lo escrito en el documento “CARTA ABIERTA DE RECONOCIMIENTO”. En este documento se hace un repaso exacto de lo que es trabajar en un club de barrio como el nuestro, muchas horas de trabajo para intentar sacar adelante una filosofía en la que creemos sobre el deporte, la participación, el barrio, la infancia y la juventud, la solidaridad, la igualdad, etc.; unos criterios con los que, con toda seguridad, hoy por hoy no se consigue mucho pero a los que nos negamos a renunciar.
La historia nos ha demostrado que aquí no sobra nadie que todos somos validos y necesarios para empujar este carro que cada vez pesa un poco mas (señal de que estamos creciendo), pero que por desgracia pocos son los que se acercercan un poco para ayudar a empujar. Esta falta de renovación es uno de los motivos por lo que aun se notan mas las ausencias, por eso me permito pedir a los que están hoy en día un poco mas de ayuda, paciencia y comprensión ante los fallos que se cometen y que son fruto del trabajo diario.
Un saludo y seguir con animo.