Ese es el resumen de lo ocurrido el fin de semana en el desplazamiento de los bilbaíno a tierras navarras. La cruz la pudimos conocer con el juego del Sani en el primer partido que acabo con una abultada victoria de los locales por 3 – 11 en la que ha sido la peor puesta en escena del año. Por suerte el equipo se repuso y reacciono a tiempo para volver a casa con reparto de victorias y mejores sensaciones. El 5 – 4 final conseguido en el último ataque bilbaíno fue la cara de la moneda.
Comenzó desde el montículo José Romero que se mantuvo 4 entradas, tras el debuto Miguel Rizo que llevo el partido hasta el primer out del 9º capitulo y cerro Sergio Atxa. No estuvo muy caliente el ataque bilbaíno pero brillaron José Morales con home run en solitario sencillo e impulsada; Domingo Morillo con un remolque y 2 dobletes y Rafael Llames con doble.
Tras el mal partido del arranque de jornada llegaba la hora de dar el máximo para volver con algo positivo de la jornada. Se subió a la loma Juan Lopez que trabajo 3 entradas y 1/3 con un destacado trabajo; cerro el juego y se anoto la victoria Remigio Leal. Tres bateadores destacaron sobre el entonado ataque bilbaíno: De nuevo Domingo Morillo que sumo 4 sencillos y piso 2 veces el home; Raul Morban bateo para home run, sencillo, 2 impulsadas y 2 carreras y Rafael Llames con 3 sencillos y remolque.
Tras la jornada sabatina en Pamplona del equipo de División de Honor, la mañana del domingo nos deparaba el estreno del equipo filial en el diamante bilbaíno. Para la ocasión el visitante era uno de los “gallitos” de la competición, el Miralbueno de Zaragoza. La victoria fue para los visitantes pero a pesar del 15 – 11 final, el joven equipo bizkaino planto cara en todo momento.
Labor combinada desde el montículo de Wesly Checo, Sergio Atxa y David Gutiérrez. Estuvieron entonados con el bate Jorge Hortua consiguiendo 2 dobles y sencillo y David Gutiérrez con doble y sencillo.
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