“Decíamos ayer…” que las victorias frente a Beisbol Navarra, en el derbi vasco, iban a ser muy importantes. Y lo han sido.
Pero obtenerlas, no resultó “nada fácil”. No, no fue fácil ganar al BN. SANI se vio obligado a luchar más de lo que a priori tenía previsto para llevarse las dos victorias, porque los navarros se defendieron con uñas y dientes, aunque los bizkaínos fueron superiores. En juego, en contundencia…y en el resultado final.
Es cierto que la novena de Aritz García opuso una férrea resistencia, demostrando también su poder con el bate y solucionando con solvencia las numerosas ocasiones de peligro que San Inazio le proporcionó. También lo es que BN estuvo siempre a la altura, que demostró ser un equipo competidor y competitivo, que posee unos peloteros “descarados” que no se arredran ante ningún pitcher, pero que si embargo no pudieron con la efectividad de un SANI que supo mantener a raya a un equipo ambicioso y bien estructurado.
A pesar de que la disputa de esta jornada correspondía a la segunda vuelta y debía ser jugada en Pamplona, se habían originado problemas operativos importantes y finalmente, se decidió llevarla a cabo en Bilbao. Por ello BN actuó como home Club y le correspondió realizar la defensa en primer lugar.
Así, San Inazio se encontró sobre el montículo con Jorge Hernández, su viejo castigador y otrora lanzador saniarra, que durante las primeras entradas amenazaba con repetir el castigo infringido en la primera jornada del pasado mes de marzo. Sin embargo, terminó por cargar con la derrota, porque su dominio tan solo le duró tres innings, puesto que los bates bizkaínos comenzaron a tomarle la medida a sus recursos y a chocarle la pelota con precisión.
Fue Leo Correa el encargado de abrir la brecha en la 4ª entrada, arañando un trabajado boleto a 1ª, para que José Abilio Ferrer, con un tremendo batazo de dos bases, arropado por el fly de sacrificio de Kreisber Auciello y los jonrones de Daniel Moreno y José Amaury Noroña, se consiguiera romper la racha de tres innings en blanco y subieran las primeras 5 carreras al marcador bilbaíno.
De nuevo repitió Correa, en la 5ª, su trabajo de conseguir otro boleto y también repitió Ferrer su doble para que Eduardo Blanco empujara con otro batazo de dos bases, a Correa y Ferrer a pisar la goma del home y anotar 2 nuevas carreras.
Pero aún faltaba el vuelacercas de Frederman López, en la parte alta de la 6ª, para cerrar el marcador con las 8 definitivas carreras.
De nada sirvieron las dos anotaciones del BN, en la 6ª y 8ª. El partido ya estaba sentenciado y el luminoso reflejaba la victoria bizkaína por 2 a 8.
El receptor Jose Abilio Ferrer anduvo listo y efectivo con su bate, sacudiendo tres pepinazos, dos de ellos de dos bases (y amenazando para el segundo juego). Frederman López siguió sus pasos con dos (uno doble) y el homerun que no encontró compañeros en las bases. Eduardo Blanco conectó también su doble, anotándose 2 remolcadas y Daniel Moreno, se sentó luego de batear una pelota que salió, de buena y muy larga, por encima de la valla.
Pero faltaba José Amaury Noroña, que acababa de incorporarse al equipo para ocupar la parcela del shortstop, vacante por la lesión del titular Correa y que sacudió, primero, un imparable y más tarde, envidioso, también sobrevoló la cerca por el jardín izquierdo, anotándose su primer cuadrangular con el uniforme blanco a rayas azules.
Se había conseguido batear 9 hits, y metido el miedo en el cuerpo del lazador pamplonés que, sin embargo aguantó estoicamente las nueve entradas completas que duró el partido. Esta vez, Hernández, no pudo con la ofensiva saniarra.
Claro que, Kepa Pocero había subido a la lomita a Elio Silva, su abridor talismán, que contrarrestaba a la perfección los intentos ofensivos navarros. Silva se encargó de eliminar por la vía rápida a 7 bateadores en las seis entradas que lanzó y, ganador, cedió la cima de su montículo a Rubén González para que ponchara otras 4 veces más, durante los tres turnos que duró su trabajo, salvando el juego.
El primer encuentro ya estaba ganado.
Pero la jornada amenazaba con tormenta climatológica. Y también deportiva.
José Sánchez, primero de los tres lanzadores que defendieron el montículo pamplonica del segundo encuentro, no pudo evitar que Aníbal Medina le robara en su primer turno al bate, una costosa y trabajada base por bolas. Y tampoco pudo evitar que Yoel Caballero se la volara por encima de la cerca del jardín derecho, anotando las dos primeras carreras para el SANI.
Pero la tormenta no había hecho más que empezar, puesto que el cuatro bate y encargado de mascotear para los celestes, José Abilio Ferrer, que había amenazado con seguir castigando con su bate los lanzamientos de Sánchez, cumplió con su amenaza y volvió a sacudir la pelota tan fuerte, que la perdió “para siempre”, conectando su cuarto cuadrangular de la temporada y subiendo al casillero, una carrera más y con ella, esas tres citadas primeras carreras bilbaínas.
Le tocaba el turno abridor a Royd Hernández que defendió su montículo, mejor que bien y cerró la primera entrada sin permitir anotación.
Con 3 x 0 daba comienzo el segundo turno de bateo celeste y Moreno que acababa de batear un doble, es empujado hasta home por el sencillo del zurdo Frederman, que a su vez anota, remolcado por el batacazo de dos bases de Aníbal Medina, que lleva a Noroña (sencillo al center) a pisar la 3ª. Llega al cajón de bateo, el designado Correa que sacude un peligroso y efectivo imparable por el jardín derecho, otorgando a Noroña y Medina, su derecho de anotar la 3ª y 4ª carrera.
Royd continuaba firme y seguro, a pesar de permitir que Albes le anotase una carrera, porque cerró la 2ª entrada dejando a tres corredores en base sin anotar. Tampoco importó demasiado que le anotaran otra en el tercer turno, ya que cerró el 4º y el 5º, sin permitir ninguna carrera más.
Y llegó el 5º turno de bateo saniarra. Kreisber Auciello se empeñó en emular a sus compañeros jonroneros y jonroneó el suyo para anotar la octava y dejar que Eduardo Blanco, impulsado por Moreno, pisara el home y marcara la novena y definitiva carrera.
Pero…ahí está el 6º inning. Ay Dios. ¡Qué entrada más dolorosa! El mentor celeste se ve en la necesidad y conveniencia de realizar obligados cambios en defensa. Beisbol Navarra no pierde la oportunidad de aprovechar la coyuntura y comienza a hacer sonar sus bates.
Un sencillo, una base por bolas, otro sencillo, uno más, otro boleto, un flyout de Eduardo Rivas (perfectamente atrapado por Ferrer) un ponche de Víctor Reyes y finalmente otro batazo de aire al siete, cogido al vuelo. Tres outs y se cierra la desdichada entrada.
Pero todo ello, seguido y en conjunto, contribuyó a que los despiertos pamplonicas anotaran, nada menos que 4 carreras y dejaran a dos corredores en base.
No tuvo suerte alguna, el refresco celeste y hubo de ser relevado también, dando paso al montículo botxero a Armando Dueñas para que cerrara el juego y lo salvara, ponchando a 4 agitadores que pretendían entorpecer su pitcheo, permitiendo un solo hit en las tres entradas lanzadas, sin que le anotaran ninguna carrera.
Los alborozados, y por momentos alborotados, espectadores seguidores de la novena pamplonica, se vieron obligados a calmar sus ánimos al comprobar que aquella reacción puntual de su equipo, para su desconsuelo, se quedaba en tan solo eso: reacción puntual y pasajera.
Como tampoco pudieron evitar el halago a la simbiosis entre los precisos tiros a segunda de Abilio Ferrer y la perfecta asistencia de Amaury Noroña para, con tiempo sobrado, anular dos intentos de robo seguidos.
Sí, es cierto. San Inazio padeció momentos de incertidumbre y cierto temor, pensando en Damocles. Pero hizo gala, una vez más de su solvencia pelotera y terminó por doblegar, de nuevo a un Beisbol Navarra que pretendía, en justicia, arrebatar un encuentro que los bizkaínos habían encarrilado convenientemente.
Como convenientes fueron los 3 hits de Caballero (1 doble) los 2 de Eduardo Blanco (1 doble), los otros 2 de Daniel Moreno (1 doble), más los 2 sencillos de Amaury Noroña, el homerun de Abilio Ferrer y el de Kreisber Auciello y los sencillos de Frederman López y Leo Correa (lesionado) más el pepino de dos bases de Aníbal Media, con sus tres boletos a 1ª.
El legendario Tom Lasorda, comentaba en cierta ocasión que “no tengo ninguna duda de que todos y cada uno de los peloteros que configuran mi lineup, van a hacer lo imposible y conveniente para, cumpliendo con mis instrucciones, conseguir los mejores resultados”.
Lasorda, el sábado, hubiera quedado satisfecho. Como satisfechos quedaron Pocero y los aficionados que se mojaron en las gradas.
Bah, simple sirimiri bilbaíno…
Excelente jornada, que ni siquiera la lluvia se atrevió a estropearla.
Aurrera SANI.
1º PARTIDO – BOX SCORE
2º PARTIDO – BOX SCORE
ESTADISTICAS ACUMULADAS 2022
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